Curso de Formación Extracurricular
Dirección de Proyecto: Un curso exitoso

¿Qué es un proyecto? ¿Cuándo es exitoso? ¿Qué significa alcanzar el éxito? Fueron algunos interrogantes que se pusieron de manifiesto el lunes 18 de octubre en el curso Dirección de Proyecto dictado por Hugo Tapia, máster en Logística y especialista en Dirección de Proyectos.

Con una amplia convocatoria participaron estudiantes de distintas carreras que se dictan en el ámbito de la Universidad Nacional de San Luis y egresados de la institución. Esta capacitación formó parte de los Cursos de Formación Extracurricular organizado por la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales con el objetivo de brindar capacitaciones que contribuyan a la formación profesional de los alumnos.

¿Qué es un proyecto? Son formas de organizar actividades que surgen de alguna idea u objetivo que se alcanzarán a futuro, explicó el disertante haciendo referencia a que los proyectos mayoritariamente surgen de ideas mínimas, que por lo general con el paso del tiempo se van explayando hasta alcanzar grandes emprendimientos.

“La dirección de proyectos es la aplicación de conocimientos, habilidades, herramientas y técnicas a las actividades para satisfacer los requisitos del trabajo”. Construir una casa, emprender un negocio, hasta construir una súper estructura son ideas que tienen que pasar necesariamente por una serie de pasos que conforman lo que se denomina “Etapas de un proyecto”.

Como ya dijimos partimos de una idea, el paso a seguir está en trabajar en la Formulación y Evaluación de un proyecto. “Este último paso es considerado el más difícil porque es en él donde verificamos las falencias de nuestros trabajos y las mejoramos para que sea un plan con alcances prometedores a corto o a largo plazo” explicó el especialista, quien además recalcó que nada nos garantiza el éxito.

“No existe una fórmula que nos garantice el éxito por completo. Podemos estar dirigiendo un proyecto financiado por millones de pesos o dirigido por los mejores expertos del mundo pero esas características no nos pueden determinar que nuestro trabajo será exitoso”.

Las causas de fracaso de un proyecto están analizadas, en líneas generales, por las siguientes estadísticas: pobre definición de requerimiento en un 50%, inadecuada gestión de riesgos en un 17%, deficiente gestión en el control del alcance en un 15%, problemas de comunicación en un 14%, falta de recursos clasificados en un 3% y otros en un 1%. El análisis profundo de estas variables es clave para que el funcionamiento del equipo de trabajo y el proyecto en sí, alcancen avances que tendrán incidencias positivas una vez que el plan esté en ruedo en la sociedad.

“La dirección incluye identificar los requisitos; establecer objetivos claros y posibles de realizar; equilibrar las demandas concurrentes de calidad, alcance, tiempo y costes y adaptar las especificaciones, los planes y el enfoque a las diversas inquietudes y expectativas de los diferentes interesados”.

Todos podemos ser directores de nuestros propios emprendimientos, sólo necesitamos conocer las herramientas básicas necesarias para evitar que nuestros trabajos corran riesgos. Con una buena planificación y con el cumplimiento y análisis de las etapas de un proyecto esos riesgos serán fáciles de solucionar.